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CRÓNICA. El Plasencia gana al Granada en el último suspiro (65-64)

Marc Cuesta busca el tiro ante Berni Castillo y Pin.
Plasencia Extremadura
65
Covirán Granada
64
CB PLASENCIA:
Cuesta (19), Vargas (17), Miguel García (-), Loncarevic (9), Mario Álvarez (8) -cinco inicial- Blázquez (10), Pérez (-), Rubio (2), Cores (-).
COVIRÁN GRANADA:Álvaro Nogueras (2), Jaime Medina (4), Luis López (-), Berni Castillo (12), Javi Hernández (3) -cinco inicial- Pablo García (14), Óscar Anguita (-), Nacho Pin (14), 'Bice' García (7), Rubén Pérez (-), Roberto Gómez (8).
PARCIALES:
18-17, 12-22 (30-39 al descanso), 13-12 y 22-13 (65-64 final).
ÁRBITROS:
Martín Granados y Aguilera Mellado. Eliminaron por faltas personales al local Cores (m.40) y a los visitantes López (m.38) y Castillo (m.40).
INCIDENCIAS:
Pabellón Ciudad de Plasencia, 800 espectadores.













Redacción / Plasencia


Un tiro libre de Mario Álvarez, con el reloj marcando un segundo para el final, dio la victoria al Plasencia Extremadura ante el Granada (65-64) en un partido en el que fue a remolque hasta dos minutos para la conclusión del encuentro. El equipo granadino, que llegaba con un balance de diez victorias seguidas, supo leer el partido desde el arranque y supo imponer su ritmo gracias a su superioridad desde el perímetro.

Los visitantes completaron treinta minutos sencillamente primorosos, en los que supieron contener el poderío en el rebote de hombres como Álvarez o Loncarevic para mantenerse dentro del partido en todo momento. En el segundo cuarto, el Covirán asestó su primer golpe serio con un parcial 1-7 que le despegó en el marcador justo antes del intermedio (30-39).

Los triples de los nazaríes compensaron la falta de ideas durante buena parte del tercer acto, por lo que la renta se mantuvo en una distancia prudencial que se elevó a los once puntos tras una canasta de tres de Nacho Pin. Este enceste incluso arrancó los aplausos de los aficionados rivales, rendidos tras la buena circulación granadina de balón.


Sin embargo, todo cambió en los últimos diez minutos. El Covirán se metió en bonus a los pocos segundos, lo que incrementó aún más la diferencia entre la cantidad de tiros libres que cada equipo dispuso -35 para Plasencia, 17 para el plantel de la Fundación-. Los extremeños empezaron a acercarse peligrosamente y fue entonces cuando los nazaríes se acordaron de la cantidad de tiros que se habían fallado por una mala finalización cerca del aro.

Los de Jesús Porras fueron enjugando la desventaja hasta voltearla por completo gracias a un triple de Marc Cuesta (64-62, a 01:44 para el final). Con 64-64 se llegaron a los dos últimos ataques. El Granada falló el suyo y el Plasencia lo hizo en primera instancia en un tiro de Marc Cuesta, pero Mario Álvarez capturó el rebote y sacó la falta de Anguita a 1 segundo para el final. El canterano anotó uno de sus dos lanzamientos y dejó la victoria en casa (65-64) para seguir metiendo presión al líder.

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