CRÓNICA. La UPP cierra la temporada con derrota en Pucela (4-1)

Una acción del partido entre el Valladolid y la UPP.

Real Valladolid 4 UP Plasencia 1 REAL VALLADOLID: Dani, De Vega, Tomás, Mario, Jorge (Adeva), Pelayo, Amit (Sergio), Adrián, Fran, Hassan (José M.) y Toni (Alex). UP PLASENCIA: Héctor, Julio, Serrano (Manzano), Parri, Chema, Núñez, Platero, Adri (José M.), Corrales, Rubén y Antonio. GOLES:0-1. m. 15, Antonio. 1-1, m. 50, Fran. 2-1, m. 80, Adrián. 3-1, m. 82, Fran. 4-1, m. 84, De Vega. INCIDENCIAS: Anexos de Zorrilla. 100 espectadores.

3 PUNTOS 2 PUNTOS 1 PUNTO Antonio Parri Platero El Norte de Castilla / Valladolid La Unión Polideportiva Plasencia dijo adiós a la temporada con una derrota intrascendente en los Anexos de Zorilla ante el Real Valladolid (4-1). Los pucelanos tenían asegurado el sexto puesto y los placentinos, la permanencia, por lo que el tropiezo no dejó de ser anecdótico. El partido arrancó de forma muy favorable para los unionistas, ya que en el minuto 15 Antonio se marcó una jugada individual desde el medio del campo y tras irse de tres contrarios estableció el 0-1. Apenas iniciada la segunda parte, el propio Antonio se quedó solo frente a Dani, que atajó su disparo sin problemas.  Fue el fin del juego de los placentinos. A partir de ese momento el Real Valladolid decidió darse un homenaje de fútbol. Fran, en el minuto 50 igualó el encuentro (1-1) y un minuto después Toni remató sin suerte. El partido todavía no parecía decantado a favor de ninguno de los dos equipos, pero a partir del minuto 80 se produjo una avalancha de los locales. El propio Fran, José M. y Mario ensayaron sin concesiones sus disparos contra la portería de Héctor. Los últimos quince minutos se jugaron prácticamente en el campo de los visitantes y Dani apenas tuvo trabajo. Adrián, Fran y De Vega batieron en cuatro minutos al portero visitante (4-1) y los últimos seis minutos aún tuvieron ocasión de hacerlo en más ocasiones. El equipo placentino se rompió. El Valladolid logró desquiciar a los placentinos, que atajaron como pudieron el arreón local y se vieron desbordados en todo momento.