La espera mereció la pena. Hacía más de diez años que un combinado nacional no visitaba Plasencia. Lo hizo la Selección Española Sub-19 de los Kiko Casilla, Raúl García y David Silva en 2005. Incluso, habría que preguntar a los más viejos del lugar si había visto algún equipo nacional absoluto en tierras placentinas. Finalmente, la capital del Jerte se cobró una deuda histórica recibiendo a la bicampeona del mundo de fútbol-sala, que, al igual que hizo un día antes en Cáceres, ofreció una nueva exhibición en forma de goleada (8-0) y volvió a poner de manifiesto una enorme diferencia de calidad sobre una discreta pero voluntariosa Macedonia.
Habría que remontarse también a más de una década para ver La Bombonera con un aspecto tan formidable como el que presentó este martes, olvidándose de que era jornada de Champions para llenar el pabellón hasta la bandera, tanto en su grada supletoria como en los pasillos superiores. A más de uno le recordó el Plasencia Galco-CAI de los playoffs de ascenso a la ACB.
Bajo este envidiable escenario, la Selección de José Venancio López cantó arrebato desde el primer minuto. Con una afición entusiasmada, los primeros disparos a puerta se celebraron casi como si fueran goles. La alta línea de presión volvía a hacer estragos a Macedonia en su salida de balón. De esta forma, los primeros tantos no tardaron en llegar. En el 3, Álex hacía el primero a la salida de un córner (1-0); y un minuto después, Fernandao sacaba a relucir toda su calidad para pisar el balón, tirar al portero y enviar el esférico mansamente a la red (2-0). El hispano-brasileño del Dinamo de Moscú fue uno de los jugadores más vitoreados por la parroquia extremeña.
Vasil Skenderovski decidió frenar la acometida roja con un tiempo muerto. La superioridad hispana era tal que los aficionados incluso premiaban con aplausos cualquier acercamiento tímido rival.
El parón, si bien no despejó el dominio español, sí que equilibró el juego. O mejor dicho, hizo que Macedonia pareciera menos ‘sparring’ de lo que reflejó en el Multiusos cacereño. Las llegadas nacionales se reprodujeron con menos densidad y los macedonios empezaron a cruzar el campo con relativa comodidad. Ni siquiera el latigazo de Aicardo que supuso el 3-0 en el minuto 12 hizo que los balcánicos se olvidaran de mantener la intensidad hasta el descanso.
Más goles
El inicio de la segunda mitad repitió el arranque de la primera. La Selección Española apeló de nuevo a un alto grado de tensión al que los macedonios les costó plantar cara a medida que sufrían el lógico desgaste de medirse por dos ocasiones, en menos de 24 horas, a uno de los mejores equipos del mundo. Veinte minutos que se cerraron con otros cinco goles, si bien pudieron ser varios más.
Sergio Lozano reanudó la cuenta anotadora tras un disparo cruzado. Imparable el derechazo del ala del Barça para hacer el 4-0 en el minuto 22. Le siguió el segundo de Fernandao, tras anticiparse en la circulación de balón macedonia y establecer el 5-0 en el 26. Y prosiguió el castigo Bebe en el minuto 30 tras un zurdazo que supuso el segundo gol con la elástica roja del jugador de El Pozo Murcia, que estrenaba internacionalidad en este periplo extremeño (6-0).
Con casi diez minutos por jugarse, aún hubo tiempo para distraerse viendo fluir la ola alrededor de La Bombonera, observar cómo Macedonia tenía el arrojo de plantar la figura del portero jugador y disfrutar con dos tantos más. El 7-0, obra de Raúl Campos a cuatro minutos para el final en colaboración un jugador de Macedonia; y el definitivo 8-0, en los segundos finales, lo firmó Fernandao para hacerse con su ‘hat-trick’ particular.
Con doble victoria y 18 goles, la Selección Española cerró su preparación de cara a los dos compromisos más importantes de la temporada. El primero, la fase de clasificación para el Campeonato del Mundo, que se jugará entre el 10 y 14 de diciembre en Holanda ante Holanda, Bosnia Herzegovina y el primer clasificado en la fase preliminar del grupo formado por Letonia, Armenia, Chipre y Estonia. Y el segundo, el Campeonato de Europa que tendrá lugar en Belgrado a finales del mes de enero.
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