De haber perdido, se hubiera puesto a nueve puntos del
cuarto puesto y hubiera dicho adiós a muchas de sus opciones de playoffs. Tras
imponerse al Don Benito, la UPP se pone a cinco puntos del cuarto puesto y a
siete del segundo, un escenario diametralmente opuesto. Se puede decir que los
placentinos vuelven a depender virtualmente de sí mismos a tenor de los
enfrentamientos directos que tienen que venir.
El Don Benito, por su parte, pierde la estela del líder
Cacereño al que visitará el próximo domingo y vuelve a mirar por el retrovisor
la situación del quinto clasificado, precisamente su verdugo este domingo.
El aroma de final se tradujo en un colorido ambiente en las
gradas y en tensión e intensidad sobre el césped. El Don Benito fue el primero
en avisar en dos acciones a balón parado que remató el central Garretas fuera
de los tres palos.
A partir de ahí, superados los diez primeros minutos, el
Plasencia hizo una mejor lectura del encuentro para traer en jaque a la defensa
calabazona. Luismi, casi por primera vez en lo que va de temporada, jugó muy
cerca de los volantes para contener y replegar y la zaga del Don Benito no supo
defender esa situación.
Las ocasiones locales no tardaron en llegar. En el 12, Karim
estuvo a punto de aprovechar una falta de comunicación entre los centrales; y
en el 13, Garretas cortó in extremis un remate a bocajarro de Álex Jiménez.
Finalmente, en el minuto 17 llegó el 1-0. Cifu botó un saque
de esquina desde la derecha para el cabezazo de Luismi en el segundo palo que
cogió a Sebas Gil completamente vendido.
El capitán siguió descolgándose y llegando desde atrás con
mucho peligro. En el 27, volvió a cabecear a la red un centro de Iván Henares,
pero el asistente anuló a la acción ante la incredulidad del delantero.
En su tercer testarazo en apenas quince minutos, de nuevo
tras un saque de esquina, volvió a acariciar el segundo.
También tuvo las suyas Karim. La primera en la recta final
del primer periodo que se encontró con el paradón de Sebas Gil.
El meta calabazón fue una auténtica pesadilla para el atacante
ghanés y el artífice de que el Don Benito se mantuviera con vida hasta el
final. Ante Karim, salvó por dos veces disparos que eran medio gol. Y ante
Luismi, más de los mismo en uno contra uno que hubiera sentenciado el choque en
el minuto 72.
El Don Benito no consiguió meter miedo hasta el último
cuarto de hora. Primero, tras un disparo de Adri desde fuera del área que se
encontró con la manopla de Sergio Moyà. Y ya casi en el 90, en un centro al
corazón del área que no estuvo acompañado por un remate certero.